El pacto del reloj
Juan José Valencia.

13 de enero de 2023 a 18 de febrero de 2024.

Un acuerdo, un trato, un propósito de pausa, de dilación, de parón en una deriva de odio y
guerra, de fin. Un alto al fuego. Una misión de paz en relación al territorio. Un pensamiento
sobre los acontecimientos, sobre el clima y su variabilidad, sus cambios, adulteraciones y
atentados, así como el pensamiento del mal 1 y de su reconocimiento pero también su
sometimiento y lucha.
Esta exposición.
Pintura desplazada, arte de los desplazados, de los errantes, de los peregrinos, de los viajeros y
aquellos que se aventuran a descubrir lo monstruoso de lo canario, sus dobles, sus triples, sus
tretas para condicionar el pensamiento. La extrañeza de su falsa familiaridad, sus usos y
abusos. Tierra de tránsito, multicultural, lugar de encuentro. Cosmopolita y de emergencia.
Lugar de acogida y asilo, de protección o de guarda para una viaje por encontrar un lugar en el
mapa. Lugar de búsqueda de las verdaderas motivaciones sobre los argumentos de una
sociedad de escucha. Oír y ser escuchado. Que te escuchen. Que te observen tus movimientos,
tus posiciones en redes sociales, tú política íntima. Dispositivos de rastreo, geolocalización y
vínculo. Construirnos en la escucha, tener voz. Pintar.
Lugares de continúa búsqueda. Alimento del deseo. Cultura de frontera. Territorio de
contrabando que se manifiesta en una esfera pública que connota el escenario y la escena del
Estado y la política. Transmutado y consolidado a través de gestos antes del abandono de la
Casablanca por parte de Trump. Su autogolpe de estado dinamitó todos los frentes ideológicos
del planeta. El dominio de los mass media y los medios: Twitter, la prensa, los fake y la libertad
de prensa, así como, el dominio de los líderes de opinión y la opinión pública. Las Presure Press
fruto del amarillismo, delirio de poder, en manos de los propietarios de los medios y sus
lobbies.
Líneas editoriales flojas que nada tienen que ver con lo blando que debería ser el sentido de
nuestras fronteras. Tergiversar el territorio y dislocarlo. Muros. Barcos de esclavos,
asentamientos de concentración fuera de los países a los que se ha migrado originalmente.
Estamos hablando de conductas xenófobas, fascistas y autoritarias que descubren los dominios
nacionalistas ultras de la política. El surgimiento de los vestigios radicales de la lucha mundial
en la que estamos inmersos desde la guerra de Siria. La pandemia acrecentó los
comportamientos inhumanos, la purga y el escarmiento a la sociedad. Las mentiras con las
asociaciones de ideas (acrecentar la confusión), con la gestión de la enfermedad y más
particularmente entre ellas la de la negación de la OMS (Organización mundial de la Salud) y
sus tesis.
Las patentes y la investigación, las acciones de las farmacéuticas, las estafas de las mascarillas.

1. Ctr. Warburg, Aby. El ritual de la serpiente. Editorial Sexto piso. 2022
2. Palenzuela ,Nilo. La lengua desplazada. Discursos de ingreso. Academia de La Lengua.
2017. p.34

El stock y la producción, el abastecimiento, los índices de muertos. Los vivos y sus acometidas
en el delirio de vergüenza cínica y delirante que azotan los gobiernos y las sociedades. La
psiquiatrización de la vida y de los hechos conductuales y antropológicos. ¿Y cómo no?
Artísticos y culturales. La censura. La estigmatización del pensamiento libre.
El duelo. La muerte. La verdad.
El drama de los sin nombre o sin documentar, las marchas en caravana de los desplazados en
América hasta la frontera norte con Estados Unidos de América. Las cacerías a caballo de
inocentes, la pobreza de los desplazados internos de New York.
La necesidad de una carta de los desplazados de implantación global. Un salvoconducto.
La guerra del Rigor Mortis. Cruel como muchas, injusta como otras, pero hipócrita como pocas.
Ucrania. Y la soberanía nacional atenazada. La violencia de una agresión continua. Europa
agredida y violentada energética, alimenticia e ideológicamente. La violencia del Estado
hegemónico explotador y líder.
La negación de la necesidad de una espiritualidad global asentada en la concordia y la
convivencia de los pueblos y sus derivas. El respeto de las claves, los templos y las leyendas o
glosarios de los mapas. Lugares por cuidar y de cuidar. No sólo patrimonio.
El mismo mar la misma gente.
La celebración de la vida. Por otra parte. Del cuidado y de la paz. De la meditación, la mesura y
la pausa. Una reflexión a cuenta de la vida en relación a los atentados contra bienes naturales
públicos (dragos) en Tenerife previos a un horroroso incendio.
El retrato de grupo de una joven Alma, a los 15 años en plena pandemia.
Una reflexión sobre nuestros comportamientos en vida a sabiendas de la muerte de los otros y
su llegada, y cómo condicionamos los acontecimientos y la lectura y relectura de los mismos
en nuestra vida.
El trauma de una sociedad afectada. Doliente y en duelo. Y en plena guerra.
Un territorio desplazado, un sujeto desplazado.
Esta exposición que se inaugura el sábado 13 de enero a las 10: 30 h. compone un ejercicio
sobre el tiempo y su responsabilidad. En definitiva sobre no solo nuestros actos pero sí
nuestros hábitos y silencios ante la injusticia o lo mal avenido.
No exige tomar posición, pero sí denuncia la secuencia real de lo acontecido y no se queda
impávida aunque nuestra casa sea cualquier sitio 2 .

1. Ctr. Warburg, Aby. El ritual de la serpiente. Editorial Sexto piso. 2022
2. Palenzuela ,Nilo. La lengua desplazada. Discursos de ingreso. Academia de La Lengua.
2017. p.34